Jamás cambies tu Naturaleza. Es lo Único que tienes
“Mientras el escorpión se hundía en el río y luchaba con sus patas por salir, un viejo monje budista lo vio desde el borde del río y decidió ir a sacarlo. El viejo monje entró al río, camino despacio por el agua y con mucho respeto junto sus manos para poder atrapar al escorpión. Apenas lo tuvo entre sus manos, el escorpión obedeciendo a su naturaleza, sólo atinó a picarlo con su aguijón. El pobre monje sintió la picadura y por reflejo lo dejó caer al agua. Sin embargo, intentó nuevamente recoger al pobre escorpión que luchaba por su vida. Pero el problema era que cada vez que lograba tomarlo entre sus manos el arácnido le clavaba su aguijón. Un pobre campesino que se había detenido a mirar la escena, se sorprendió por la testarudez del monje, que no dejaba de tratar de salvar al animalejo. Después de esperar un rato le gritó al monje: -Oiga, ¿por qué no deja a ese bicho ahí? ¡esos bichos son malos!, lo va seguir picando, es parte de su naturaleza. El viejo maestro...